Todos hemos tenido o tendremos en un momento de nuestras vidas, la terrible decisión de elegir entre reformar o cambiarnos de casa.
Esta decisión está sujeta a varios factores que fácilmente nos ayudarán a decidir cuál es la mejor opción. En primer lugar analizaremos la localización: vistas, proximidad de servicios, altura, ruidos externos…. Otro de los aspectos a valorar sería los metros cuadrados con los que cuenta y los que realmente necesitamos. No es muy aconsejable pensar a muy largo plazo, ya que el tiempo cambia muchas cosas, pero si establecer un plan a medio plazo de los usuarios que vais a habitar la vivienda. Y en tercer lugar, algo que no se ve ni se toca, algo que solo sabes tú, y es “si quiero vivir aquí”.
Mejor el reformar la vivienda, aunque sea casi tirándola toda.
Desde nuestro punto de vista, casi siempre será mejor el reformar la vivienda, aunque sea casi tirándola toda, que cambiar de casa. Como todos sabemos los cambios son a veces traumáticos, y cuando ese cambio es de casa todavía más. Tu casa no son solo unas paredes, un suelo, un techo,…. es mucho más. Es tu vecindario, tu entorno, tu hábitat, todo ello forma parte de nuestras vidas porqué en el momento que cruzas el umbral de la puerta, dará lo mismo si tu casa es nueva o reformada, es tu casa.
RAFA MUÑOZ CARDÓS
Miembro junta gobierno CDICV
(colegio diseñadores de interior de la Comunidad Valenciana)
